Claudio Roldán nació el 16 de enero de 1.993 en la pequeña localidad de Posta San Martin número dos de la provincia de Formosa. El menor de tres hermanos vivió su infancia rodeada de juegos y lecturas guiadas por su madre, una docente que daba clases en una escuela primaria del lugar. Desde muy pequeño, Claudio sintió interés por los cuentos que regularmente leía junto a su hermana y a su madre y que despertaron más curiosidad en el joven. De adolescente, comenzó a fantasear con escribir el verso perfecto o la frase más significativa y junto con un amigo pasaba horas escribiendo canciones y poemas sin sentido. Cuando cumplió 17 se mudó a la capital de la provincia, para terminar sus estudios secundarios y luego ingresar a la universidad y seguir la carrera en el profesorado en Letras, pero esto último, no pudo hacerlo. Una vez concluidos sus estudios secundarios, recibió la invitación para jugar al vóley en el equipo de primera división de la provincia, la Unión de vóley de Formosa, en el cual, jugó algunos años hasta darse cuenta que este deporte no era el sendero por el que quería atravesar. Mientras tanto, cuando nadie lo veía, pasaba el rato imaginando y escribiendo historias que posteriormente tiraría a la basura para que nadie más las leyera.
Cansado de entrenar y no sentirse satisfecho, Claudio dejó el vóley para trabajar en el negocio familiar, el comercio de ropa, con el cual tampoco se sentía conforme. En busca de lo que verdaderamente lo apasionaba, una vez más, decidió dejar aquello que hacía y que lo angustiaba demasiado. Volvió a su pueblo, a la casa de sus padres, quienes lo ayudarían a empezar de nuevo. Rápidamente dieron con el instituto José Manuel Estrada de la localidad de Gral. Manuel Belgrano dónde ingreso a estudiar el profesorado en lengua y literatura en el cual, se encuentra cursando su último año de la carrera y aún sigue fantaseando con el verso perfecto.
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